"Trabajo, honestidad y compromiso", son las tres promesas que hace Ignacio Nacho González, flamante entrenador de All Boys. El exarquero regresó a la Argentina tras su primera experiencia como técnico de un plantel profesional; durante el primer semestre de este año condujo a Atlético Venezuela en el campeonato de Primera de esa nación sudamericana.
Previamente había entrenado a las divisiones inferiores de Racing y había sido ayudante de campo en Las Palmas. Por lo tanto, dirigiendo al equipo de Floresta en el próximo campeonato de Primera B Nacional, tendrá su estreno a nivel nacional. Germán Sassone, ex arquero de El Porvenir, San Telmo y Barracas Central, es su ayudante técnico y Emmanuel Rivero, el preparador físico
González tomará la posta de José Pepe Romero, el referente máximo de All Boys. El nuevo DT, en una entrevista realizada por el canal oficial del club, declaró: "Es un desafío y un orgullo venir detrás de Pepe, seguramente la persona más importante de la historia de All Boys. Es una parada linda. En mi carrera y en mi vida nada fue fácil y fui logrando los objetivos".
"Me gusta -explica en el mismo reportaje- el fútbol por abajo, ser agresivo, que los laterales crezcan y tener una idea de juego definida. Tengo mi metodología, que no digo que es mejor ni peor que otras. Lo importante es tener llegada al jugador. Y hoy me siento futbolista y con cercanía al jugador; no sé si es una ventaja o no".
En cuanto a su idea de juego, es claro: "Me gusta salir jugando por abajo, pero con una serie de movimientos preestablecidos. Va a llevar tiempo convencerse. Y tampoco intentarlo cuando no es conveniente. A veces es necesario saltar líneas y tirarles el bochazo a los delanteros".
Nacho no esconde su verdadero objetivo. "Hay que ganar, es una frase hecha del fútbol. Al final te juzgan los resultados. Pero no digo ganar de cualquier forma, sino reflejando la metodología de trabajo que uno practica en la semana". Y agrega: "A pesar de haber estado los últimos meses en Venezuela, nunca dejé de mirar y estudiar el fútbol argentino. Siempre estuve encima. De All Boys me seduce que hay jugadores con buen pie. Y es bueno que se mantenga la base del plantel, sobre todo la defensa, que con la continuidad que tuvo al final del campeonato le hicieron pocos goles".
Ignacio González (45 años) desarrolló su etapa de futbolista entre 1991 y 2008. Arrancó en Racing y luego atajó en Newell's, Las Palmas de España (en dos etapas), Pachuca de México, Estudiantes de La Plata, Nueva Chicago, Unión Española de Chile y Arsenal. No sólo tenía la misión de frustrar a los atacantes rivales, Nacho también tuvo contacto con el gol propio: convirtió 14 penales en partidos oficiales.
Además registra cuatro presencias en el arco de la Selección Argentina. Por las eliminatorias para el Mundial de Francia 1998, atajó ante Uruguay (0-0); Colombia (1-0) y Bolivia (1-2), los tres como visitante. Y en la Copa América 1997, en Bolivia, ante Ecuador (0-0).
En la página web oficial de Atlético Venezuela resaltaron la figura y el trabajo de González en la despedida. Publicaron: "Nacho echó mano de la prolífica cantera atlética y dio oportunidades a chicos que terminaron el semestre asentados como importantes elementos del plantel profesional. Le dio la titularidad a Jesús Briceño, un arquero de 18 años que fue considerado una de las revelaciones de la campaña y además fue la figura en la cancha de los dos duelos por Copa Sudamericana que disputaron los de Fuerte Tiuna ante el Palestino de Chile, en el gran debut internacional del Atlético". En otro párrafo señala: "La familia de Atlético Venezuela quiere expresar el mayor de los agradecimientos a Ignacio González, Germán Sassone y Emanuel Rivero por el buen trabajo desempeñado como cuerpo técnico del primer equipo, pero sobrepone al buen trabajo en la cancha, la calidad profesional y humana de quienes honraron el escudo del cuadro nacional".
Clarin.com
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